Arriba en el Cerro Alegre, en Valparaíso, hay una gran casa azul en una esquina. Esta casa, que hoy es el hotel Casa Blu, tiene tanta historia como el puerto, fue construida en 1904 y aún conserva las huellas de sus antiguos habitantes: inmigrantes ingleses, alemanes e italianos, intelectuales, artistas… incluso albergó a la congregación de Monjas Paulinas “Hijas de San Pablo”. Todo eso se siente en este lindo hotel, totalmente restaurado y lleno de detalles y piezas únicas que la familia propietaria ha recolectado en sus viajes por el mundo. Tiene sólo 13 habitaciones, cada una con su propio estilo y todas diferentes. Ricas camas y sábanas, vista inmejorable, buenos desayunos y un servicio cálido y familiar. Cuenta con jardines y terrazas, además de un amplio living vidriado en la parte alta, mirando a la bahía de Valparaíso.