Uno de los tesoros BBB más valorados en Providencia es la fuente de soda Caco, dimunita y desapercibida, donde cuatro mujeres con maestría presentan un fantástico repertorio de platos chilenos, que en porte y sabor triunfan. El menú es hogareño y se presenta en una pizarra -que varía según disponibilidad- un listado acotado de platos que cuestan $5.700, como: Cazuela de vacuno (destacable), Charquicán, Albóndigas, Pantrucas o Tomaticán, acompañados de arroz, puré o papas fritas cortadas a cuchillo. En caso de agregar ensalada el valor total es de $6.300. El servicio es cercano y ágil, donde lo primero que llega a la mesa es un trozo de marraqueta con pebre picantón. Venden vino y cerveza, y tienen además platos especiales a $6.300 y $7.000 con ensalada, entre estos destaca el costillar, carne al horno o pescado frito. En resumen, una verdadera picada.